Recupera la ingesta de frutas y verduras para mejorar tu dieta tras las vacaciones.
Has pasado largas jornadas de sol y diversión en terrazas, con tus tapitas, paellas, cervecitas… celebrado barbacoas hasta el anochecer con amigos, probando restaurantes nuevos o disfrutando de comidas exóticas en lugares apartados del mundo. Estamos seguros de que lo has pasado en grande estos días, pero ahora has vuelto al trabajo, de nuevo a los horarios, las rutinas y las obligaciones. Las tapitas y cervecitas casi se transparentan bajo tu camiseta, seguro que has cogido un kilito de más, has vuelto hinchado/a, con pesadez y retención de líquidos, pero… ¡Qué te quiten lo bailao!
Tranquilo/a esto no dura para siempre y se hará más corto si sigues nuestros consejos para hacer de tu vuelta una experiencia más saludable.
Lo primero que te recomendamos es que te lo tomes con paciencia, has disfrutado mucho estos días, no lo estropees con agobios y dietas estrictas, empieza simplemente por cuidarte un poco. Programarte una dieta saludable no significa quitarte de todo lo que te gusta, simplemente se trata de comer con consciencia, de manera equilibrada y controlando las cantidades.
- Organiza tus comidas: en vacaciones todos/as nos saltamos los horarios y comemos a deshoras, ahora es importante que vuelvas a desayunar, almorzar, merendar y cenar. Evita picar entre horas, es lo que más perjudica a tu metabolismo, es preferible que comas unas 5 veces al día pocas cantidades para no llegar a las comidas importantes hambriento/a. En el segundo desayuno y la merienda opta por piezas de fruta o yogures desnatados.
- Los días de los refrescos y cervezas han llegado a su fin: El agua será tu mejor aliado si pretendes eliminar la retención de líquidos y perder esos kilitos adquiridos. Si eres de los que les cuesta beber te recomendamos que tengas siempre un vaso de agua a mano y lo consumas a pequeños sorbos.
- Come en colores: haz las paces con las frutas y las verduras, éstas deben estar presentes en todas tus comidas. Su alto contenido en fibra te ayudarán a equilibrar tu cuerpo de nuevo y a olvidarte del estreñimiento causado por la mala alimentación veraniega.
- ¡Muévete!: Realiza ejercicio, te ayudará a que tu entrada a la rutina se haga más llevadera y te sentirás mucho mejor.
- Si es fresco mucho mejor: evita comidas precocinadas ya que habitualmente son más altas en grasas saturadas, lo ideal es elegir alimentos frescos y saludables. No olvides el pescado, especialmente el pescado azul alto en Omega 3, puedes cocinarlo en papillot con un chorrito de aceite de oliva.
- Date caprichos: no seas reaccionario/a, toma algún dulce, refresco, cerveza, tapa, si te apetece, se trata de no abusar de ello no de quitarlo definitivamente de tu dieta. Solo hemos vuelto a la rutina, no hay por qué torturarse.
Si deseas más consejos sobre la vuelta de las vacaciones, visita este artículo publicado en la newsletter del año pasado, en él encontrarás valiosos consejos para que la vuelta no se haga una condena.
Vuelta a la rutina… ¿cómo lo sobrellevamos?
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