Los dispensadores de agua para oficina más capaces desde el punto de vista técnico son las fuentes de agua que proporcionan caudales refrigerados y calientes, una doble oferta que permite hidratar y refrescar a los trabajadores, a la vez que ofrecen la opción de poder calentar comidas sencillas, como preparaciones alimentarias liofilizadas, que resultan muy útiles y prácticas para comer en el lugar de trabajo.
Estas fuentes, por lo tanto, pueden regular sus temperaturas de manera flexible, mediante un simple termostato. El agua fría que ofrecen las fuentes siempre sale a una temperatura que oscila entre los 8 y los 15 grados, según las necesidades, mientras que el agua caliente, sale alrededor de los 80 o 90 grados, que son las temperaturas ideales para preparar cafés e infusiones. Estos dispensadores de agua para oficina no necesitan modificaciones técnicas previas para ofrecer agua fría o agua caliente, ya que el agua sale por vías separadas o incluso por la misma, según el modelo. Basta con hacer una petición al técnico de mantenimiento de la compañía suministradora de la fuente de agua para que varíe el rango de temperaturas máximas o mínimas.
Antes de adquirir una máquina de este tipo, es importante estudiar el rendimiento del modelo sugerido por la empresa que se adapte mejor a las necesidades, teniendo siempre en cuenta el valor añadido de obtener una buena provisión de agua fría o caliente para los empleados