En verano los golpes de calor pueden llegar a quitarnos el apetito, y algunos platos que normalmente disfrutamos pueden no apetecernos en esta época del año por resultar demasiado pesados; además, comemos fuera de casa con mucha más frecuencia y eso nos trae algunos problemas de digestión, gases acumulados o pesadez de estómago. ¿Qué podemos cocinar en casa cuando hace tanto calor, hemos comido rápido y mal con los amigos y nuestro estómago sólo puede pensar en algo fresco y ligero?
La respuesta se encuentra en las ensaladas. Sabrosas, muy ligeras y sobretodo frías. No; no nos estamos refiriendo a servir hojas crudas y aliñadas, pues la cocina es pura imaginación y además de la receta estándar existen centenares de formas diferentes de preparar una ensalada. ¿Has llegado a pensar que una ensalada es un plato aburrido o únicamente para hacer dieta? Quédate a leer las propuestas que tenemos pensadas para ti y empezarás a incluir muchas más ensaladas en tus menús de ahora en adelante.
El primer paso es saber que puedes preparar una ensalada de lo que quieras: todo lo que hay en tu cocina es válido. Tú eres el chef; inventa una nueva ensalada y sorprende a las personas que tienes invitadas en la mesa. Haz una lista de tus ingredientes favoritos y prepara una deliciosa y sabrosa mezcla que podrás enfriar en la nevera para refrescar tu cuerpo mientras comes. Si no tienes tiempo para ello, te proponemos unas cuantas ensaladas que tienen éxito en cualquier mesa; además, todos los ingredientes los podemos encontrar fácilmente en nuestro súper mercado más cercano, con lo cual no nos robará mucho tiempo prepararlas.
¿Te gusta el arroz? Las combinaciones de arroz con otros ingredientes son infinitas: un rosco de arroz con guisantes, trozos de pimiento rojo, atún y mahonesa (para 4 personas); arroz frío con aceitunas, trozos de tomate, anchoas y aliñado con aceite; arroz integral con trozos de queso fresco o light, atún, trozos de tomate grande y maduro y aliñado con salsa vinagreta; arroz con tomates cherry, zanahoria, palitos de cangrejo y maíz…
El arroz es uno de los ingredientes más usados en ensaladas de verano pero hay muchos otros que ofrecen grandes posibilidades; por ejemplo, la lechuga o la fruta. Con lechuga podemos preparar una abundante fuente de ensalada acompañada de todo lo que te guste: tomate, maíz, zanahoria rallada, remolacha rallada, cebolla, aceitunas (rellenas o negras), trozos de queso tierno, frutos secos, trozos de manzana, y aliñarla con aceite de oliva, vinagre o vinagre de modena, o incluso preparando una vinagreta. También podemos combinar verdura y carne acompañando la lechuga de pechuga de pollo asada y troceada. Sin embargo hay ingredientes menos convencionales que también pueden aportar color y sabor a tus platos frescos: podemos hacer ensaladas de patata con aguacate, acompañadas de cebolleta, y aderezada con sal, pimienta y vinagre de manzana; o una ensaladilla de gambas troceadas y mezcladas con patata y zanahoria previamente trituradas, todo ello unificado con un poco de mahonesa y acompañado de un delicioso gazpacho; o una sabrosa ensalada de pasta con fresas troceadas, piñones y aliñada con salsa vinagreta. ¿Y qué hay de los huevos? Tenemos una exquisita ensalada murciana de huevos duros pelados y troceados, acompañados de atún, cebolla dulce cortada en aros, aceitunas negras y tomate natural pelado y cortado en trocitos. Tú eliges. El verano es la mejor época del año para disfrutar de combinaciones imaginativas con alimentos frescos. Además, dan lugar a recetas sencillas y rápidas que te permiten preparar grandes cantidades en poco tiempo; ideales para compartir comidas con familiares o amigos. Estas vacaciones sorpréndete con el gran abanico de posibilidades que te ofrecen los ingredientes de tu nevera y disfruta del frescor de comidas ligeras y jugosas. Post relacionados:
