Es imprescindible que las empresas trabajen para garantizar la seguridad de los trabajadores en todos los aspectos. Y cuando hablamos de seguridad no solo nos referimos a los elementos clásicos de protección como cascos, señalizaciones y demás; este concepto también engloba otros aspectos importantes como la higiene laboral. En este artículo nos centraremos en identificar la importancia de la higiene laboral en el puesto de trabajo.
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La higiene laboral se refiere a las condiciones en el ambiente donde se trabaja que aseguren la salud (física y mental) de las personas que desarrollan su actividad profesional. En este artículo te vamos a comentar los detalles para proporcionar dicha higiene y los riesgos que comporta no respetarlas.
Mediante procesos para mantener la higiene laboral se actúa para poder prevenir, analizar, evaluar y solucionar los posibles problemas y las posibles amenazas que pueden poner en peligro una correcta situación del trabajador.
Y es que existen riesgos físicos, psíquicos, químicos y biológicos que se consideran las principales amenazas que pueden aparecer en el entorno laboral. Se necesita poner, por tanto, especial atención a esta tipología de problemas que pueden ser más o menos agudos dependiendo de las tareas a desempeñar por los trabajadores.
Además, tener en consideración la higiene laboral revierte en un mejor desempeño de las funciones laborales y por tanto en mayor rendimiento y beneficios para los diferentes proyectos que se desarrollan en el entorno laboral.
A nivel físico, es necesario que un lugar de trabajo proporcione a sus trabajadores vestuarios en caso de que fuera necesario, lavabos separados, zonas de descanso… Deben existir explícitamente unas normas de higiene laboral que sean respetadas y conocidas por todos los trabajadores. Así, se consigue velar por la participación de todas las personas implicadas en el entorno laboral de una manera ejemplar y similar, actuando de manera conjunta para mantener un óptimo ambiente de trabajo día a día.
Una de las normas básicas para mantener una correcta higiene laboral es el lavado de manos. Mantener las manos limpias, libres de posibles gérmenes o bacterias, es clave.
Desde la ropa de seguridad, el casco, las gafas o el calzado, entre otros, los elementos de protección personal (EPP) son el complemento más adecuado para mantener una correcta higiene laboral, así como la seguridad.
Existen muchos tipos de empresas y algunas probablemente puedan realizar una correcta gestión de residuos reciclando el papel que utilizan pero otras, como las compañías que manejan productos químicos, gasolina, aceite de motor, tóxicos… necesitan seguir unos estrictos protocolos de gestión de residuos para una higiene laboral adecuada y acorde con la legalidad.
Cuando se trata de higiene laboral, no sólo nos estamos refiriendo a las condiciones higiénicas del entorno físico. No hay que olvidar que un buen ambiente de trabajo y unas buenas prácticas de comunicación entre las personas que configuran un equipo de trabajo, favorecen que las personas se sientan bien, generando un entorno favorable para la salud mental de todos los trabajadores. Es importante enfatizar la importancia de este aspecto, ya que no está desvinculado del concepto de higiene laboral que estamos explicando en este artículo.
Comunicar y mantener unas correctas pautas de higiene laboral es una tarea que se inicia en la organización de una compañía pero que también debe hacer partícipes a todos los equipos para sumar en efectividad entre todos.
