El team building consiste en actividades diversas organizadas por las empresas, por lo general con el objetivo de motivar al personal y/o mejorar el ambiente de trabajo. Responder una pregunta como si estuviera en un programa de televisión, participar de una actividad al aire libre simulando el capítulo de una serie de aventuras, realizar una representación musical o construir una pirámide humana, son algunas de las actuales tendencias y nuevas propuestas en este tipo de actividades, siempre en busca de la originalidad y la diversión.
«En los últimos ocho años este formato de capacitación vivencial bajo la modalidad team building, se incrementó en un 75%. La incorporación de las nuevas generaciones a las empresas, la necesidad de trabajar fomentando el buen clima laboral y la idea de generar un ambiente de alegría en el trabajo, fueron algunos de los factores que acompañaron el crecimiento de este tipo de acciones en el último tiempo», afirma Débora Wolosky, Directora de la consultora de Recursos Humanos TikShoret.
«Hoy la demanda es cada vez mayor, tanto para la realización de actividades como en cuanto a lo creativo, lo que exige a los consultores desarrollar técnicas cada vez más dinámicas, diferentes y que respondan a estímulos o actividades del día a día. En esa línea, la simulación de juegos de preguntas, recreaciones de programas de TV con formatos novedosos, como reality shows y aventuras, así como el arte aplicado al trabajo, ahora conviven con capacitaciones más tradicionales, ganando cada vez más espacio», añade Wolosky.
Además de su aspecto lúdico y motivacional, algunas actividades de team building también sirven para detectar y formar líderes. Por este motivo, las compañías invierten cada vez más en el desarrollo de mandos medios e impulso al rol del líder para acompañar los procesos de clima laboral y convergencia intergeneracional, lo que exige también adaptar las metodologías de enseñanzas vivenciales y de construcción.
En la actualidad, muchas empresas buscan retener talento y generar el sentido de pertenencia. Para lograr estos objetivos, contar con herramientas alternativas resulta fundamental. Por eso, a través de las capacitaciones y estrategias de team building, se busca desarrollar y potenciar las habilidades personales y sociales. Trabajando con elementos de incertidumbre, realidad, riesgo, planeamiento y esfuerzo, a través de los cuales se crean diferentes ambientes que simbolizan los desafíos que se generan en el trabajo diario.
Como comenta la experta, «los empleados están cada vez más exigentes con las compañías y buscan no solo llevarse una buena remuneración salarial. El ponerse la camiseta también implica el contar con herramientas que los ayuden a mejorar en su rutina diaria, y a contar con mejores habilidades”».
No obstante, se siguen practicando las acciones o actividades de team building más tradicionales, enfocadas a estrechar lazos entre compañeros, cargos intermedios y directivos como campamentos, búsquedas del tesoro, castells (pirámides humanas) o la simulación de una línea de producción en donde los empleados trabajan todo el proceso productivo vinculado con distintos productos, por ejemplo, la producción de cerveza artesanal.
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