Los dispensadores de agua para oficinas son dispositivos suministradores de agua, ya sea agua mineral o agua filtrada, según el modelo de la máquina. Las fuentes que funcionan botellones ofrecen agua mineral, mientras que las fuentes conectadas en la red ofrecen agua purificada a partir del agua de abasto general.
Ambos tipos de dispensador están diseñados para ofrecer agua de manera constante, y están construidos con materiales resistentes, es decir, con resinas o acero inoxidable, según el modelo.
Sin embargo, a pesar de esa resistencia de serie a la acción mecánica continuada de uso, es importante tener cura de los equipos con el fin de mantener sus funcionalidad al máximo rendimiento y el máximo de tiempo posible.
Con el fin de alargar la esperanza de vida media de las máquinas de agua, es importante colocarlas alejadas de la acción de la luz directa, ya que cuando los dispositivos se recalientan, tienen que trabajar con un rendimiento extra con el fin de enfriar el agua, y si esta sobrecarga es continuada, puede desgastar la máquina en mayor media, un desgaste que, por otro lado, es totalmente prescindible, ya que basta con encontrarle una ubicación adecuada a la máquina.
Por lo tanto, además de las radiaciones solares, hay que evitar las fuentes de calor como las cocinas o demás electrodomésticos, así como las planchas o los propios sistemas calefacción, que producen el mismo efecto que la acción del sol directo.
También hay que evitar el contacto de la máquina de agua con productos de limpieza que puedan ser corrosivos, productos químicos que desprendan olores fuertes y en lugares cerrados cuyo aire pueda estar contaminado en un grado significativo, y que a su vez podrían contaminar el agua de los dispensadores. Estos ambientes cargados no tienen por qué resultar contaminantes, aunque es mejor evitarlos, dado que pueden provocar un sabor no recomendable si las partículas volátiles del aire se adhieren a determinadas partes de los equipos dispensadores de agua, como por ejemplo, las llaves de paso.
Por último, es recomendable no realizar tareas de desempolvamiento o esparcir partículas finas de cenizas o demás agentes de pequeña granulometría que puedan alcanzar las zonas de contacto del botellón con el pedestal. En cualquier caso, si es necesario realizar este tipo de operaciones, siempre se puede cubrir los dispensadores de agua con alguna tela plástica y asilan a la hora de realizar estas operaciones.