Medir la satisfacción laboral de tus empleados es una buena forma de conocer el funcionamiento de tu empresa.
Las encuestas de clima laboral son una de las herramientas que existen para poner a prueba la eficiencia del funcionamiento interno de una cadena de trabajo: el ambiente de trabajo, la comunicación, el ritmo de trabajo… Todo ello forma el clima laboral, la estabilidad (o inestabilidad) de tu empresa.
Pero no siempre es fácil advertir si algo está funcionando mal o si se puede mejorar algún aspecto de nuestra empresa. En muchos casos una encuesta de clima laboral resuelve rápidamente nuestras dudas, sin embargo, también tiene sus contras: respuestas poco sinceras, rellenar la encuesta por obligación y sin meditar sus respuestas, contestaciones en función de los intereses de cada empleado… Te presentamos una lista de los pros y los contras de una encuesta de clima laboral, con el fin de optimizar tus análisis de clima laboral y la posibilidad de realizar encuestas con eficacia.
Contras
- Demasiadas preguntas. Una encuesta demasiado larga o tediosa hará que el empleado pierda el interés en prestar atención y contestar de forma reflexiva. Recuerda que, además de realizar su trabajo, tus empleados van a hacer el esfuerzo de contestar este formulario para que puedas dibujar en tu mente un panorama realista del día a día en tus oficinas. Agradéceles esta faena haciendo encuestas breves que toquen los aspectos más relevantes para ellos.
- Miedo a la sinceridad. Si un empleado disconforme llega a temer perder su puesto por responder a una encuesta laboral con sinceridad, de seguro no nos dirá la verdad a la hora de marcar casillas. Exigir el nombre propio del empleado en la encuesta es un gran desacierto; anula completamente su efectividad.
- Contestar por obligación. Es muy importante hacer entender a nuestros empleados que necesitamos su colaboración en esta encuesta para poder mejorar sus condiciones de trabajo; no es una tarea más a realizar, es un acto de comunicación entre empleador y empleado. Si presentamos la encuesta como una obligación tajante, no nos ganaremos la colaboración de nuestros empleados, quienes contestarán por obligación: lo más rápido posible, para terminar cuanto antes, y sin prestar atención.
- Contestar en pro de intereses laborales. Otro problema que se puede generar si obligamos a especificar el nombre propio; un empleado con gran interés en mantener su puesto puede edulcorar la realidad o agasajarnos sin razón, a la vez que otro empleado podría quejarse de un determinado trabajador simplemente por falta de congenia. Debemos evitar estos personalismos.
Pros
- Anonimato.El mejor amigo de una encuesta de clima laboral: el anonimato permite expresarse con libertad, y muy seguramente recibiremos un diagnóstico certero de lo que ocurre dentro de la cadena de trabajo.
- Un procedimiento veloz. Sin duda la mayor ventaja de estas encuestas es su velocidad: si algo funciona mal lo sabremos en seguida,pudiendo atajar el problema rápidamente; si algo se puede mejorar, sabremos exactamente el qué y cómo, ya que los mismos empleados harán sugerencias.
- Diagnóstico desde una perspectiva personal. Aunque muchas de las preguntas siguen el formato de casillas, o numerando del 1 al 10, podemos incluir una sección para hacer sugerencias a título personal. Esto nos permitirá conocer muy bien qué detalles se pueden pulir para un mejor funcionamiento: por ejemplo, la re colocación de algún empleado dentro de la cadena de trabajo, o agilizar la comunicación entre departamentos.
Una encuesta laboral, bien diseñada, puede dar grandes resultados; no en vano es una de las técnicas más utilizadas en el departamento de Recursos Humanos de todas las grandes empresas. Comunícate con tus empleados, dales libertad para opinar desde el anonimato, y colaborarán encantados para optimizar el funcionamiento de tu empresa. Post relacionados: