Las demandas laborales son cada vez más exigentes e intensas, por lo que son muchos los trabajadores que tienen que comer, todos o la mayoría de días laborables, en la oficina o su lugar de trabajo. En estas condiciones no queda otro remedio que comer de tupperware, lo que no tiene por qué ser sinónimo de alimentarse deficientemente.
Comiendo de tupper es perfectamente posible llevar una alimentación sana y equilibrada, con todas las vitaminas, proteínas y tipos de alimentos necesarios, en cantidad y frecuencia, para que nuestro organismo funcione perfectamente.
Además, en caso de que detectemos que nuestro menú semanal de tupper tenga algún tipo de déficit de alguno de los alimentos esenciales, únicamente es cuestión de tomarlos en la cena o en alguna de las comidas que hagamos en casa para compensar.
El título no es una pregunta, sin una rotunda afirmación. Por supuesto que las recetas de tupper pueden estar tan buenas como las cocinadas en casa. El secreto está en ser conscientes de las diferencias entre un plato recién cocinado y otro que hay que elaborar con varias horas de antelación y, además, transportarlo en un recipiente de de plástico.
Dicho de otro modo, para que estén sabrosas y nutritivas las recetas de tupper tienen que cumplir una serie de condiciones o máximas:
1. Las recetas para llevar a la oficina han de quedar sabrosas recalentadas, lo que no ocurre con todas los platos. Por ejemplo, las comidas con salsa quedan excelentes recalentadas, incluso muchas personas opinan que están mejor que recién hechas.
2. Por otro lado, es importante las comidas transportadas en tupper no sean fáciles de volcar. Por ejemplo, una sopa queda perfecta recalentada, pero es complicada de llevar y se puede derramar fácilmente.
3. Se deben evitar alimentos que necesitan de gran frescor para quedar bien, como ensaladas verdes o con tomate ya preparadas.
4. Son recomendables las recetas que se pueden mezclar como plato único, asegurando de una sola tacada que estén sabrosas y sean nutritivas y equilibradas al poder incorporar distintos tipos de alimentos esenciales para el organismo.
El verano ya está aquí y en esta época apetecen mucho más las comidas frescas y ligeras. En esta línea tenemos algunas propuestas de recetas para llevar al trabajo con el denominador común de ser sanas, sabrosas y fáciles de preparar.
Recomendamos este plato por su potencia energética y ese toque diferente en el sabor que le proporciona el aliño de mostaza. Los ingredientes necesarios para una persona son: 100 gramos de pasta, una pechuga de pollo, tomates secos, dos cucharadas de mostaza antigua, sal, aceite y vinagre.
La preparación es muy sencilla: se pone a hervir la pasta con una pastilla de caldo y, cuando esté en su punto, se escurre y se moja para enfriarla y que no se pegue. La pechuga, hecha en plancha o sartén, se pica sobre la pasta y se añaden los tomates secos una vez preparados.El aliño puede hacerse aparte, mezclando la mostaza con el aceite, el vinagre y la sal.
La chuleta de Sajonia o filete de Sajonia es una carne de cerdo que ha pasado por salazón y está un poco ahumada. Se puede pasar vuelta y vuelta por la plancha, pero admite comerse tal como viene. En el tupper, junto a la chuleta, podemos llevarnos algo de ensalada para acompañar o una crema fría como primero. Entre tanta comida ligera, ingerir un día para variar unas cuantas proteínas nos vendrá muy bien para la salud.
Una de las comidas que más refrescan en verano son las sopas frías y dentro de éstas el gazpacho es todo un clásico. Los ingredientes básicos son los siguientes: 1 kg tomates maduros, 100 gramos. de cebolla dulce, 100 gramos de pimiento verde italiano y 100 gramos de pepino, 2 dientes de ajo, pan duro, aceite de oliva, comino, sal pimienta y vinagre.
Para comenzar troceamos todas las verduras y las trituramos bien finas con la thermomix o batidora, agregamos el pan remojado y seguimos triturando. A continuación, agregamos las peladuras y las cabezas de las gambas que previamente hemos escaldado un minuto en agua con sal. Luego lo colamos, salpimentamos, agregamos el aceite vinagre, comino y emulsionamos el conjunto hasta obtener un gazpacho. Para mantener la comida fresca durante el transporte se puede utilizar una neverita acolchadas.
Las alcachofas naturales son un poco engorrosas de pelar, sin embargo, merece la pena tomarlas naturales además de porque resultan más sanas porque puede ser la verdura que más sabor pierda al ser envasada.
Una vez peladas y cortadas, se vacían de las hojas interiores y se cuecen al vapor. El salmón se puede hacer al vapor o a la sartén, pero su tiempo de cocción es menor, así que es mejor prepararlo por separado. Se rellenan las alcachofas y se añade un chorrito de crema fresca.
Los frutos secos tienen bastantes calorías, por lo que en ocasiones nos vienen bien para obtener la energía que nos hace falta para afrontar con buen humor el trabajo que nos queda por hacer por la tarde. Además, combinado con el arroz podemos conseguir un plato que nos ofrezca el aporte calórico necesario para recuperar la energía y la buena predisposición.
El arroz salvaje con frutos secos se prepara como cualquier arroz y para que no quede seco es importante añadir alguna verdura, ya sea cruda o salteada: tomate, calabacines o berenjena.
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