Todas las sociedades necesitan habitantes que dispongan de libre acceso a una alimentación básica -que puedan vivir plenamente y explotar sus facultades- y así poder desarrollarse y evolucionar. La desnutrición es el principal factor de estancamiento de cualquier sociedad o comunidad de personas, además de una vía de extinción.
El concepto de seguridad alimentaria surgió en la década de los 70 para hacer referencia a este hecho. En los años 80 y 90 se añadieron matices a esta definición, como el acceso económico a una buena alimentación o el acceso a la correcta explotación biológica de los mismos.
En otras palabras: la seguridad alimentaria y nutricional es “el libre acceso a una alimentación básica y de calidad para todos los seres humanos, así como el acceso a su explotación biológica”.
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Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), el concepto de seguridad alimentaria aparece en los años 1970.
El término ha evolucionado: desde consideraciones de carácter cuantitativo y económico, hacia una definición que tiene en cuenta la dimensión humana de este fenómeno (cuestiones culturales e ideológicas).
La definición socialmente aceptada en 1975 identificaba la seguridad alimentaria y nutricional con la "capacidad en todo momento de aprovisionar a todo el mundo con productos básicos, de modo que se puede sostener un crecimiento del consumo alimentario, soportando las fluctuaciones y los precios".
En 1990, la definición incluía la capacidad de asegurar que el sistema alimentario provea a toda la población del aprovisionamiento alimentario y nutricionalmente adecuado a largo plazo.
Esta evolución de la concepción ha influenciado las diferentes estrategias llevadas a cabo por la FAO y otros actores humanitarios de cara a asegurar la seguridad alimentaria de todos, y especialmente de los países del Sur.
Se considera que un hogar está en una situación de seguridad alimentaria cuando sus miembros disponen de manera sostenida a alimentos suficientes en cantidad y calidad según las necesidades biológicas.
Existen dos definiciones de seguridad alimentaria utilizadas de modo habitual para medir la seguridad alimentaria y nutricional (ofrecidas por la FAO):
Las fases de la seguridad alimentaria van desde la situación de seguridad alimentaria hasta la de hambruna a gran escala.
El hambre y la hambruna dan lugar a la inseguridad alimentaria.
La inseguridad alimentaria puede considerarse crónica o transitoria. El hambre transitoria supone una situación con un nivel muy alto de vulnerabilidad al hambre y a la hambruna.
Para asegurar la seguridad alimentaria es necesario eliminar esa vulnerabilidad.
Por su parte, el hambre crónica no es hambruna. Es similar a la malnutrición y está relacionada con la pobreza que existe principalmente en los países pobres.
Estamos hablando de un derecho fundamental del ser humano y constitucional en cualquier nación.
Por lo tanto, es una cuestión de Estado de máxima prioridad en cualquier país: el Estado debe proporcionar a todos sus ciudadanos un acceso correcto a la alimentación que precisan para desarrollar sus vidas y mantener (y hacer evolucionar) dicha sociedad.
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