En la actualidad, 40 millones de europeos padecen estrés y 20 millones más sufren alguna enfermedad crónica.
En este sentido, desde el ámbito empresarial es básico promover la salud de los trabajadores y asegurar la sostenibilidad del puesto de trabajo desde el seno de la empresa.
Y con este fin, el Instituto Europeo de Salud y Bienestar Social presentó en 2012 la Alianza Europea de Empresas Saludables, con el objetivo de que empresas de todo tipo se comprometan en la promoción de unos hábitos cotidianos saludables y óptimos.
El doctor Manuel de la Peña, presidente del Instituto Europeo de Salud y Bienestar Social, que es centro colaborador de la Organización Mundial de la Salud (OMS), explicó en el momento de la formación de dicha Alianza Europea, que las empresas que protegen la salud de sus trabajadores son las más exitosas y que basta con invertir un euro en la salud laboral para conseguir un reembolso de cinco en un tiempo muy limitado. El doctor advirtió de que un entorno laboral inseguro o poco saludable puede generar estrés a los trabajadores, lo que en consecuencia aumenta el riesgo de que sufran accidentes y lesiones.
Por otro lado, el doctor José Martín Moreno, director del Program Management de la OMS, considera que para una divulgación eficaz de las buenas prácticas desde el ámbito laboral consiste en la simple aplicación de sentido común, y que los empresarios deben recordar que el principal activo de las empresas es el trabajador. Según el propio Martín Moreno, cualquier empresa tiene que fomentar el bienestar entre sus empleados porque no solo es beneficioso para los empresarios, sino porque es su responsabilidad legal. Insiste, además, en que las empresas deben trabajar para prevenir la aparición de patologías y fomentar un ambiente psicosocial adecuado, y subraya también la importancia de impulsar el compañerismo y la solidaridad, así como de reconocer los méritos del trabajador. También considera fundamental que la compañía cuente con unos recursos sanitarios suficientes y eficientes y que anime a sus empleados a seguir una dieta saludable y a practicar ejercicio físico para mantenerse en forma y sentirse sanos.
Las empresas que se incorporan a esta alianza internacional tienen que elaborar un libro blanco que facilita el intercambio de conocimiento y deben crear un comité de expertos en el que participen profesionales reconocidos y trabajen con el fin de difundir, normalizar y aplicar dichos conocimiento. En los indicios de esta Alianza se contabilizaron de entrada unas 8.000 empresas que habían conseguido el certificado de AENOR sobre riesgos laborales y que contaban con la sensibilidad suficiente para empatizar dicha esta iniciativa.
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